jueves, 19 de abril de 2012

Pájaros.


La verdad siempre nos hace más grandes y más fuertes. Yo me sacudo sinceridad por los cuatro costados, bien lo sabes, mal que me pese. Bien que te hago. Y me siento libre para hacerlo. Sobrevuelo los límites de esta incoherencia disfrazada de pájaros en vuelo al atardecer. Mi estupidez no te alcanza esta vez; quisite superarme y ahí lo tienes...tu compendio de irrealidades vagas sin apoyos y sin energías. Una vana sensación de superfluas explicaciones ahora me llena de pies a cabeza, mis momentos vacíos y tus cantos añorados...en su momento los tuviste sin quererlos y ahora que los quieres...porfían en tu tormento.


La vida nos pone a prueba y nos manda mensajes de alerta. Me hice fiel a mí misma y me coloqué en mi lugar...mientras tú arrebatabas tiempo al tiempo. Mis sentidos me advertían de tu inminente ignoracia. La razón despertaba al desamor, a la desidia y el autocontrol. Pronto fue todo automático y electrónico...mis miradas desaparecían en bandada y tus huellas ya no existían. Tus ganas ya no eran mis ganas, me escupiste al mundo fuera de tus muros. Quizás nunca los atravesé.

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